Sexo asignado al nacer (Ecuador)
Este video habla sobre el sexo asignado al nacer de una persona, la identidad de género y expresión de género, y cómo todos estos pueden ser diferentes. Explica que a quién alguien se siente atraído, es decir, su orientación sexual, no está relacionado con el sexo asignado al nacer, la identidad de género o la expresión de género. [AMZ-097-esEC]
Juventudes
El ‘sexo asignado al nacer’ se refiere a la etiqueta que un profesional médico le da a un bebé al nacer. Un profesional médico puede decir que un bebé es niño, niña o intersexual, según lo que el profesional médico observe sobre el cuerpo del bebé. Por ejemplo, a un bebé con una vulva se le etiquetará como niña, y a un bebé con un pene se le etiquetará como niño. Algunos bebés pueden tener cuerpos o cromosomas que no se ajustan a las categorías típicas de hombre o mujer. Un profesional médico puede etiquetarlos como intersexuales. El sexo asignado al nacer se refiere a cómo alguien más ve nuestros cuerpos y no tiene en cuenta cómo nos sentimos por dentro.
La identidad de género es la sensación que alguien tiene en su interior sobre ser hombre, mujer u otro. Todas las personas tienen una identidad de género. A veces, la identidad de género de las personas coincide con su cuerpo y otras veces no. Una persona puede nacer con pene e identificarse como niño, o nacer con vagina e identificarse como niña. Esta persona puede tener una identidad de género llamada «cisgénero». O alguien puede nacer con pene e identificarse como niña, o nacer con vagina e identificarse como niño. Esta persona puede tener una identidad de género llamada «transgénero».
El término «género no binario» se utiliza para referirse a una persona que no se identifica como hombre o mujer. También hay personas experimentan su género como fluido. Esto significa que pueden sentirse como una mezcla de cualidades masculinas y femeninas, o sentirse más femeninas a veces y más masculinas en otras ocasiones. Esto se llama fluidez de género y no está relacionado con el sexo biológico de una persona.
Cuando compartes tu identidad de género con el mundo a través de tu ropa, el maquillaje, la forma de hablar, actuar y más, se llama ‘expresión de género’. El sexo asignado al nacer, la identidad de género y la expresión de género de una persona pueden ser diferentes. A quién alguien se siente atraído, es decir, su orientación sexual, no está relacionado con el sexo asignado al nacer, la identidad de género o la expresión de género. Todas las personas tienen un sexo asignado al nacer, una identidad de género y una orientación sexual.
Lo importante de recordar es que las personas merecen expresarse de la manera que les parezca correcta y ser respetadas, sin importar cómo se identifiquen, cómo luzcan, cómo se vistan o cómo se etiqueten a sí mismas.
Familias
El sexo asignado al nacer o sexo biológico es la etiqueta que un profesional médico le da a un bebé cuando nace. Esta asignación se basa generalmente en lo que un médico observa sobre el cuerpo del bebé. Los bebés nacidos con pene se etiquetan como niños, y los bebés nacidos con vulvas se etiquetan como niños. Los bebés cuyos cuerpos no encajan claramente en la categoría de niño o niña se etiquetan como intersexuales. El sexo asignado al nacer se trata de lo que alguien observa sobre el cuerpo de otra persona, no de cómo esa persona puede sentirse internamente acerca de ser hombre, mujer u otro género.
La identidad de género es la sensación que alguien tiene en su interior sobre ser hombre, mujer u otro. Todas las personas tienen una identidad de género. A veces, la identidad de género de las personas coincide con su cuerpo y otras veces no. Una persona puede nacer con pene e identificarse como niño, o nacer con vagina e identificarse como niña. Esta persona puede tener una identidad de género llamada «cisgénero». O alguien puede nacer con pene e identificarse como niña, o nacer con vagina e identificarse como niño. Esta persona puede tener una identidad de género llamada «transgénero».
El término «género no binario» se utiliza para referirse a una persona que no se identifica como hombre o mujer. También hay personas experimentan su género como fluido. Esto significa que pueden sentirse como una mezcla de cualidades masculinas y femeninas, o sentirse más femeninas a veces y más masculinas en otras ocasiones. Esto se llama fluidez de género y no está relacionado con el sexo biológico de una persona.
Las personas expresan su identidad de género con el mundo a través de su ropa, maquillaje, forma de hablar, actuar y más. El sexo asignado al nacer, la identidad de género y la expresión de género de una persona pueden ser diferentes.
A quién alguien se siente atraído, es decir, su orientación sexual, no está relacionado con el sexo asignado al nacer, la identidad de género o la expresión de género. Todas las personas tienen un sexo asignado al nacer, una identidad de género y una orientación sexual.
Los roles de género son las normas sociales que dictan los tipos de comportamientos que generalmente se consideran apropiados para las personas en función de su género. Como padres, tutores y otros adultos de confianza, es importante reconocer lo perjudiciales que pueden ser los roles de género si se imponen a los jóvenes. Por ejemplo, insistir en que un niño no llore cuando está herido o triste limita su capacidad para expresar una gama completa de emociones humanas y empatizar con los demás. Los roles de género pueden limitar la capacidad de los jóvenes para ser quienes realmente son, cuando, por ejemplo, una niña que quiere practicar deportes es alentada a ser «femenina». Cuando se motiva a los niños de manera sutil, y no tan sutil, a adherirse estrictamente a los roles de género, puede causar ansiedad, inseguridad, estrés y baja autoestima.
Con todo esto en mente, podemos apoyar a los niños a desarrollar actitudes sobre el género que fomenten el respeto por las muchas formas en que las personas eligen identificarse y expresarse.
Educadores
El sexo asignado al nacer o sexo biológico es la etiqueta que un profesional médico le da a un bebé cuando nace. Esta asignación se basa generalmente en lo que un médico observa sobre el cuerpo del bebé. Los bebés nacidos con pene se etiquetan como niños, y los bebés nacidos con vulvas se etiquetan como niños. Los bebés cuyos cuerpos no encajan claramente en la categoría de niño o niña se etiquetan como intersexuales. El sexo asignado al nacer se trata de lo que alguien observa sobre el cuerpo de otra persona, no de cómo esa persona puede sentirse internamente acerca de ser hombre, mujer u otro género.
La identidad de género es la sensación que alguien tiene en su interior sobre ser hombre, mujer u otro. Todas las personas tienen una identidad de género. A veces, la identidad de género de las personas coincide con su cuerpo y otras veces no. Una persona puede nacer con pene e identificarse como niño, o nacer con vagina e identificarse como niña. Esta persona puede tener una identidad de género llamada «cisgénero». O alguien puede nacer con pene e identificarse como niña, o nacer con vagina e identificarse como niño. Esta persona puede tener una identidad de género llamada «transgénero».
El término «género no binario» se utiliza para referirse a una persona que no se identifica como hombre o mujer. También hay personas experimentan su género como fluido. Esto significa que pueden sentirse como una mezcla de cualidades masculinas y femeninas, o sentirse más femeninas a veces y más masculinas en otras ocasiones. Esto se llama fluidez de género y no está relacionado con el sexo biológico de una persona.
Las personas expresan su identidad de género con el mundo a través de su ropa, maquillaje, forma de hablar, actuar y más. El sexo asignado al nacer, la identidad de género y la expresión de género de una persona pueden ser diferentes.
A quién alguien se siente atraído, es decir, su orientación sexual, no está relacionado con el sexo asignado al nacer, la identidad de género o la expresión de género. Todas las personas tienen un sexo asignado al nacer, una identidad de género y una orientación sexual.
Los roles de género son las normas sociales que dictan los tipos de comportamientos que generalmente se consideran apropiados para las personas en función de su género. Como padres, tutores y otros adultos de confianza, es importante reconocer lo perjudiciales que pueden ser los roles de género si se imponen a los jóvenes. Por ejemplo, insistir en que un niño no llore cuando está herido o triste limita su capacidad para expresar una gama completa de emociones humanas y empatizar con los demás. Los roles de género pueden limitar la capacidad de los jóvenes para ser quienes realmente son, cuando, por ejemplo, una niña que quiere practicar deportes es alentada a ser «femenina». Cuando se motiva a los niños de manera sutil, y no tan sutil, a adherirse estrictamente a los roles de género, puede causar ansiedad, inseguridad, estrés y baja autoestima.
Con todo esto en mente, podemos apoyar a los niños a desarrollar actitudes sobre el género que fomenten el respeto por las muchas formas en que las personas eligen identificarse y expresarse.